LA CRISIS DE LA BANCA
Son los beneficios de la banca en 2007; un 20% más que en 2006.
Evidentemente, España está en crisis; evidentemente, la banca no tiene nada en común con España.
Mientras España se retuerce; mientras los españoles debemos reajustar nuestros gastos para poder llegar a fin de mes y nos sentimos incapaces de hacer con nuestros hijos lo que hicieron nuestros padres con nosotros (a saber: facilitar su independencia económica), la banca no tiene tiempo suficiente a la hora de contabilizar sus beneficios. Éstos siempre van por delante de sus cálculos.
No es la banca un servicio a la ciudadanía, sino un señor de la ciudadanía, y el amo indiscutible de quienes se presentan como representantes de la ciudadanía. Gracias a la banca, los partidos existen; gracias a los "representantes populares", la banca engorda sus beneficios. Es la simbiosis perfecta.
Los partidos políticos, auténticas empresas improductivas para el bien general, producen pingües beneficios para quién, carente de honor, de dignidad y de respeto por los demás, les presta sus servicios, cuanto más viles, mejor valorados. Pero ello es posible porque su amo, la banca, así lo posibilita.
La banca, única beneficiaria real de la situación sustentada por los políticos, posibilita los fondos necesarios para que éstos realicen las preceptivas campañas propagandistas, canto permanente a la mentira y manifiestamente útiles para la consecución de sus objetivos; y es que, en nuestro mundo capitalista, no hay nada como una buena campaña propagandista. Ellos saben que una mentira repetida cien veces acaba siendo verdad. y lo aplican. Quién denuncia el hecho, quién es honesto, sencillamente es acallado. No tiene, ni puede soñar alcanzar en algún momento los fondos que le resultan necesarios para hacer una buena campaña propagandística.
La banca, evidentemente, cumple su función en la tenaza. Los políticos, por su parte, si quieren seguir gozando de la mamandurria deberán cumplir con la suya; a saber: legislar con el único objetivo de que su amo y señor, la banca, salga beneficiado. Y vaya si sale. Y por una mínima parte de sus beneficios paga a los lacayos quienes a su vez legislan, en lo que pueden, además de para servir a la banca, para servirse a sí mismos.
Los paganos, o sea, la población, pagará los impuestos directos e indirectos que les sean marcados. y los impuestos ocultos que les son aplicados mediante la operativa de los bancos, quienes tienen libertad absoluta para aplicar las comisiones que les venga en gana, bastantes de las cuales se ven reflejadas en todos los productos que el "libérrimo" pueblo español adquiere en cualquier establecimiento.
¿Sabe el pueblo español los porcentajes que debe incrementar en sus productos cada establecimiento a fin y efecto de satisfacer la glotonería de la banca?. Usted, amigo lector, pregunte en cualquier establecimiento qué hacen para atender las comisiones que les cobran los bancos por tener la posibilidad de cobrar con tarjetas de crédito. por ejemplo.
19.000.000.000; un 20% más que en 2006. Y el pueblo español, en crisis.
Cesáreo Jarabo